Mi canto, que les adeudo a mis amigos…
Agradezco infinitamente mis amigos del Tonalestate por haberme invitado a tan importante evento cultural. Quiero con estas canciones, contribuir con el objetivo de Tonalestate de provocar una reflexión profunda sobre al qué dedicar la vida.
Siempre amé cantar pero con el pasar de los años, esta experiencia educativa de amistad con mis amigos italianos me fue enseñando un criterio y una visión de la vida muy distinta de lo que normalmente enseña la mentalidad común. Entonces al “escoger” las canciones que cantaría alegremente en encuentros, conciertos o al estar con amigos, sus letras tuvieran un contenido que transmitiera “algo” en función del humano. Aún si fueran canciones de amor o sencillas coplas del pueblo, hay un motivo que las hace más bonitas y más queridas. Hoy, estas canciones, son parte de mi historia y de mi identidad. Mi primera actitud es contra la injusticia y la indiferencia del hombre hacia los demás hombres.
La pobreza extrema, la soledad, el abandono, la barbarie, la inmigración, el abuso y todo tipo de violencia, son los signos de los tiempos. Por ejemplo Casas de cartón de los Guaraguao, cuenta gráficamente cómo viven los pobres de mi tierra mientras los perros, en la casa del patrón, reciben educación para que no muerdan los diarios. En No basta rezar, de Ali Primera, menciona la instrumentalización de las religiones mismas: el pobre reza pidiendo el pan para el hijo y el piloto en el avión reza para ir a bombardear a los niños de Vietnam.
Estas canciones que interpreto, que son de autores muy reconocidos de América Latina; expresan en sus letras ideas y pensamientos, con los que me identifico; al igual que el poeta que hace suyas las alegrías y los sufrimientos de los hombres del mundo.
Pero esta sensibilidad, esta actitud de “no dejar pasar nada”, nacen también de un encuentro hecho tiempo atrás, que no solo me hecho más feliz, sino que me ha ayudado a encontrar un sentido, un “algo” al cual dedicar la vida. A mis amigos de Facundo Cabral, contiene la palabras que yo deseo dirigir a mis amigos que desde Reggio Emilia y desde el inicial One Way han difundido este movimiento por el mundo y ahora más aún, dedico cien mil millones de veces la canción Amigo, del brasileño Roberto Carlos, a mi gran amigo Giovanni, que nos dejó recientemente y que nos acompaña con su presencia transparente. El amigo, cuando lo es de verdad, está siempre a tu lado en los momentos más difíciles.
Esta amistad, este amor han sido un don que ha hecho nacer una comunidad en mi lejano país. Yo soy latinoamericano, de Palito Ortega dice que ²somos gente buena de corazón y entre todos poco a poco vamos forjando, el destino de una tierra que florece”, más allá, agrego yo, de la violencia ingobernabilidad que crecen cada día.
Luego, hay otras canciones latinoamericanas, de varios autores, de temas amorosos y apasionados, llenos de nostalgia, que nos recuerdan la realidad presente, Reloj, Mujer, Solamente una vez, Gotas de cristal y una muy alegre: Parece que va llover (de Pedro Infante, mexicano)que me gusta cundo dice: “El agua la manda Dios”, pero si no pagas, no te la da el alcalde…
Finalmente tengo en mi repertorio otras canciones netamente hondureñas, recogida del folclor y la tradición como El bananero, A la capotín, llenas de inocencia y cotidianidad.
Deseo que esta Compañía siga celebrando el valor de la amistad con este evento de gran magnitud como es el Tonalestate, y así, nuestra voz, en mi caso hecha canción, contribuya humildemente a construir una nueva humanidad.
Maida Ochoa
Brava Maida! Con la tua grande sensibilità hai saputo trasmettere il sentimento dell’amicizia, della fraternità, dell’amore.
Emozioni semplici ma grandiose!